Creo que hay pocos amantes de la cerveza a los que no les suene el nombre de Mahou, empresa con una larga y exitosa carrera en la búsqueda de la calidad y difusión de esta bebida en España y posteriormente en otros lugares de este mundo globalizado.
Precisamente este 2015 se cumple el 125 Aniversario de la inauguración de su primer centro de producción en Madrid, al que seguirían otras ubicaciones en la misma ciudad hasta llegar a las modernas instalaciones de Alovera, en Guadalajara.
Esta breve introducción no pretende ser una crónica de la historia de Mahou, sino simplemente ubicar en su justo lugar la importante apuesta que ha supuesto el lanzamiento al mercado de cuatro nuevas cervezas premium, pero con un futuro enraizado en los orígenes de la marca. Es decir, el santo y seña de la larga tradición de esta reputada empresa: innovar pero sin dejar de lado la calidad, acomodándose siempre al gusto y la demanda de sus consumidores.
En esta línea de tradición e innovación, dichas cervezas no podían tener mejor nombre que el del fundador de la Dinastía Mahou, Don Casimiro, y las cervezas en cuestión llevar asociado el nombre de los distintos lugares madrileños donde estuvieron ubicados sus negocios: Amaniel, Marcenado, Maravillas y Jacometrezo.
Recientemente, tuvimos la oportunidad de asistir a una degustación de estas cervezas tan especiales, maridadas con quesos artesanos españoles de diferentes leches, curaciones y orígenes.
Sí, yo tambien pensaba como vosotros, ¿cerveza con queso en lugar de vino?. Pues, la respuesta, sin ningún tipo de lugar a dudas, es un sí rotundo y convencido. Yo era, a priori, un escéptico mas, pero después de la cata soy un convencido defensor de este tipo de combinaciones gastronómicas.
Cervezas y quesos, acordes estos con el tipo de cada cerveza, fermentación y graduación, hicieron cuatro perfectos matrimonios que iban mas allá de simples maridajes. Quesos y cervezas, cervezas y quesos se retroalimentaban potenciando su gama de sabores y aromas creando combinaciones que funcionaron perfectamente. Toda una experiencia gastronómica y , a la vez, una gratísima sorpresa.
No voy a entrar a describir las características órganolepticas ni las combinaciones de cada cerveza con los quesos que tuvimos la oportunidad de probar, ya que esto alargaría el comentario innecesariamente. Me limitare simple y llanamente a recomendaros que abandonéis los posibles prejuicios y que os animéis a degustar esta maravillosa experiencia, al menos para poder decir me gusta o no me gusta.
Para ello Mahou va organizar catas en el Antiguo Cuartel de Conde Duque pudiendo degustarse las cuatro cervezas con sus respectivos quesos al atractivo precio de 15€ por persona.Yo, desde luego, pienso repetir y os animo encarecidamente a que no os lo perdáis.
Por ultimo, dar las gracias a los anfitriones y personas que compartieron la cata por sus detallados e interesantes comentarios, así como por el buen ambiente vivido en a misma.
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